Una obra que tanto obsesionó al zamorano Leopoldo Alas «Clarín» que no pudo por menos de dejarlo sentir en «La Regenta». Y que tampoco pasó desapercibida para Galdós y su «Fortunata y Jacinta»

Así, como quien no hace la cosa, ya es el XVI año en el que «Don Juan» nos viene a visitar. Regresa desde el más allá, donde se encuentra desde que Don José Zorrilla lo creara allá por el año 1844.

Pero poco importa el cambio de época, porque la pasión, el honor, la muerte y el amor, siguen existiendo, y este último es tan poderoso que por sí solo es capaz de transformar a las personas.

Pasen, señoras y señores. Pasen y vean el drama romántico español más representado en la historia de nuestro teatro. En él encontrarán vigor y frescura dramática, virginidad y pecado, ironía irrespetuosa. Una función que, por sí misma, propicia la creación de cuadros de gran belleza plástica.

«La Tijera» se congratula de poder ofrecérselo sin necesidad de que se tenga que desplazar a ninguna parte. No hagan caso de quienes tratan de trivializar la figura de este «burlador» que, a diferencia del de Tirso de Molina, creado dos siglos antes, se libró de visitar el averno merced al amor desinteresado de una tal Doña Inés.

Agustín Ferrero Ramos

Duración aprox: 120 minutos